De acuerdo a la metodología de verificación del curso Análisis Comparado de Periodismo, el gobierno de la presidenta Michelle Bachelet cumple en parte la siguiente promesa que hizo al país en su programa de gobierno en 2014: “Crear de un nuevo sistema de intermediación y capacitación laboral, que apoye a quienes tienen mayores problemas de inserción en el mercado del trabajo, y apoyo a cesantes”.

El SENCE re-estructuró el sistema de capacitaciones mediante el programa +Capaz, mientras que la intermediación fue reorientada con las reformas a la Bolsa Nacional de Empleo (BNE) y a las Oficinas Municipales de Información Laboral (OMIL). Sin embargo, estas últimas presentan falencias. Ninguno de estos planes fueron mencionados en la Cuenta Pública.

+Capaz es un programa de capacitación que opera desde el 2014, sólo el año pasado capacitó a cerca de 96 mil personas. El sistema beneficia a hombres de hasta 29 años y mujeres hasta 64 con cursos prácticos y teóricos. También otorga recursos a emprendimientos de mujeres, capacitaciones a discapacitados y nivelación de estudios secundarios.

Para acceder a las capacitaciones de +Capaz, se debe pertenecer al 60% más vulnerable de la población, lo que se constata a través de la Ficha de Protección Social. Para enfocarse en los cesantes, se pide contar con una densidad de cotizaciones igual o menor al 50% en los últimos 12 meses.

Los cursos del programa duran entre 180 y 300 horas. Esto sigue las recomendaciones de la Comisión Revisora del Sistema de Capacitación e Intermediación Laboral (CRSCIL), que concluye que los cursos de calidad deben durar sobre 140 horas.

De acuerdo a la Cuenta Pública 2016 del SENCE, el 24% de quienes acceden a Más Capaz se encuentra trabajando, cifra que se incrementa al 56% tras seis meses de egreso, y al 65% después de un año. Para el término de este gobierno, se habrán abierto 420 mil cupos.

El BNE fue reorientado el 2016. Antes, desarrollaba su plataforma digital con Trabajando.com, pero se cortaron los servicios con ese portal. Si para el 2011 había 61 mil avisos de trabajo publicados y 332 mil vacantes disponibles, actualmente ese número ha disminuido considerablemente a 598 avisos y 4 mil vacantes.

Además, el SENCE otorgó a la BNE la facultad de administrar el Seguro de Cesantía, tarea que ejercía anteriormente las OMIL. “Como antes certificábamos a los cesantes, les podíamos dar los beneficios que tenemos acá y coordinar con ellos”, dice Nancy Quintanillas, jefa de OMIL Las Condes.

Actualmente, el BNE no es una bolsa centralizada. Varios municipios usan sus propias bolsas de empleo, que operan en paralelo a la estatal. Es el caso de Las Condes o Maipú. “Las OMIL debieran volcar todas sus ofertas y pedidos de trabajo en una bolsa de trabajo, y esto es lo que nunca ha funcionado”, señala Marcela Perticará, participante de la CRSCIL.

El SENCE se puso la tarea de fortalecer el desempeño de las OMIL mediante el programa Círculo de Empleo. No obstante, el plan piloto del programa se está realizando recién este año.